
A mediados de mayo del año pasado, el Ministerio suizo de
Exteriores (DFAE enlace externo) indicó que debía posponer el lanzamiento del
programa de cooperación 2018-2021 "hasta nuevo aviso" debido a la
crisis. El DFAE informó al gobierno de Daniel Ortega que Suiza quería
reconsiderar su colaboración.
Una de las instituciones afectadas por el cambio de
estrategias de la cooperación europea, es el ministerio de la Economía
Familiar, Comunitaria, Cooperativa y Asociativa, MEFCCA, considerado por la
presidencia, y sobre todo por la vicepresidenta Rosario Murillo, como la
"estrella" de las instituciones dedicadas a la mentalidad oficial de
promover mercados alternativos, cooperación y asociaciones de productores
pequeños.
El proceso de cierre de los programas de apoyo al MEFCCA
han destapado una olla de corruptela que ha cobrado ya las primeras
"bajas".
Fuentes fidedignas dijeron a Trinchera de la Noticia que
COSUDE pidió a las autoridades de este ministerio la devolución de bienes
facilitados en el marco del programa trienal clausurado, lo que llevó a una
auditoría interna.
Suiza reclamó la entrega de los fondos adelantados y
depositados en las cuentas del ministerio así como equipos, computadoras y
hasta vehículos depositados en manos del MEFCCA.
Sin embargo, la auditoría reveló faltantes y mal uso de
los fondos entregados por los donantes y que estaban a cargo de Ronaldo
Membreño, director administrativo y financiero de la institución.
La fuente dijo que la presidencia ordenó el despido de
Membreño, lo que ejecutó esta semana Justa Pérez, una de las dos
"codirectores" del MEFFCA. Membreño ya ya no regresó a sus funciones.
No hay información acerca de que si le formularán cargos judiciales.
En el proceso encontraron que los administradores
abusaron de diez camionetas asignados por la cooperación para los proyectos. El
hallazgo más importante es que los vehículos de trabajo no están a la
disposición de los programas en el campo o interior del país.
Algunos de esos vehículos habían sido asignados a
funcionarios de la entidad para su uso personal, como el que usaba una hija de
presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras. Otra de las camionetas la
tenía asignada el esposo de la funcionaria, quien se desempeñaba como director
del Parque de Ferias, bajo control del ministerio.
Luego del estallido social en el país, Edita Vokral,
directora de la Oficina de COSUDE en Managua (en la foto), anunció el
congelamiento de los proyectos y el cierre de sus oficinas.
Comundo tiene dos oficinas en las afueras de Managua, una
de las cuales, con sede en Estelí, estaba a cargo de Frederic Coopens, el padre
de la estudiante universitaria Amaya Coopens, una de las presas políticas más
simbólicas de la lucha contra el régimen de Daniel Ortega.
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